Software, videojuegos y arte digital
Financiación y protección de programas informáticos.
Software, videojuegos y arte digital
Financiación y protección de programas informáticos.
El notario como protección
Entre las ventajas de notarizar programas informáticos frente al Registro de la Propiedad Intelectual, están la rapidez y la posibilidad de acreditar y proteger creaciones en curso.
El código como garantía
El programa notarizado puede depositarse como garantía de cumplimiento contractual.
Cuotas convertibles notarializadas sobre el código fuente
Noken Digital Assets permite crear derechos digitales sobre el código, que pueden transmitirse de manera directa y sencilla. El titular establece la recompensa que recibirá el comprador del derecho y el plazo en el que se obliga a hacerla efectiva. Un interés sobre los fondos obtenidos, una participación sobre beneficios futuros, un derecho de explotación, o una combinación de todo lo anterior.
Beneficios para el desarrollador
Al tiempo que protege sus creaciones, el titular del software puede financiar los desarrollos mediante la venta de cuotas convertibles sobre los mismos. En el caso de obras en curso, puede ofrecer mayor seguridad al inversor notarializando otras obras de su catálogo como garantía. A diferencia de otras formas de financiación alternativa como el crowdfunding de producto, que se dirige a usuarios finales y requiere de la participación individual de numerosos compradores, las cuotas convertibles notarializadas permiten el acceso a inversores profesionales o puramente financieros que no tienen porqué ser usuarios de la aplicación, por lo que además, pueden financiar elementos concretos de la misma. Frente a las rondas de inversión mediante equity, las cuotas convertibles notarializadas no comprometen la estructura de capital, y ofrecen mayor flexibilidad al permitir obtener liquidez para desarrollos puntuales.
Beneficios para el inversor
Al comprar cuotas convertibles notarializadas, el inversor cuenta con la seguridad jurídica y la transparencia de la intervención notarial, que acredita el activo y las garantías de la oferta. El inversor puede a su vez vender su posición en todo o en parte, cediendo sus derechos ante una posible revalorización adicional a la retribución establecida en la oferta inicial. En caso de incumplimiento por parte del emisor, el derecho de crédito viene respaldado por su conversión en la parte proporcional de los activos en garantía.
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